UN BELÉN DE PALABRAS

En Palestina -la real madre patria- se entra en el solsticio de invierno (equivalente exacto de nuestro Intiraymi del 24 de junio). Allí, hace 2015* años, una joven se supo encinta:


"Pero el joven rosado decía que yo soy la elegida, que entre todas las mujeres me han señalado a mí . . . Que me bendecirían, a mí y al fruto de mi vientre ... Está bien, haré lo que me corresponda, señor ... Por qué me llamó madre si soy virgen? Qué está sucediendo? Qué va a ser de mí a partir de esta visita? " (Mario Vargas Llosa, Elogio de la madrastra. 1996)


Desde entonces, en todos los tonos, se ha tejido un belén de palabras con este misterio.
Quiero dar -con este brevísimo texto- testimonio de esa delicada incertidumbre: devuelvo a la joven dorada a su patria -la Galilea palestina- y cito la hermosa anécdota -que fundó dos milenios- en palabras de un agnóstico -Vargas Llosa- y en las luces y sombras de un 'descreído' -Leonardo da Vinci, de 1474-.


Qué bien le hará a nuestra Palestina torturada, mutilada y crucificada del 2011 recordarle al mundo que aún se espera el milagro de la paz.

(Elijo la seguidilla gitana para cantarle, porque está a medio camino entre el Asia Menor y nosotros. También porque en su estribillo hay una extraña semejanza con el haiku japonés.)

Ocho seguiriyas navideñas
(hay una guitarra al fondo)



Anunciación
Será su risa fresca
y su mirada
tierna como es el alba
y avergonzada.

Su gesto fino
perfumará las horas
como hace el vino.

Nacimiento
El sol tiñe entre gasas
montes lejanos,
la luz de la mañana
abre las manos.

Hay una estrella
que brilla en el pesebre
para la bella.


Misión
Florecilla del campo
que sola vienes
y emprendes una senda
con lo que tienes.

(Esta mañana
tembló una cruz al aire
en su peana.)

Reproche
Seguiriya gitana
qué cosas dices.
No es bueno que tu canto
haga infelices.

Copla sin queja,
sé la humilde pastora
que da su oveja.

Contentamiento
Busca que tus palabras
den las noticias
que toda madre espera
cuando da albricias.

Di: "cosa es cierta
que he colgado una estrella
sobre mi puerta".


Azofras y alcabalas
(habla el recaudador)
I
Por saber si María
finge pobrezas
escalé por su huerto
entre cerezas:


brilló una perla
bordada entre diamantes...
cuando fui a verla...

II
Miré bien en lo oscuro
de su pesebre:
eran lágrimas garzas
por un orfebre…


la telaraña
rociada del aljófar
de la mañana.

III
Y el oro de su risa,
con dulce canto,
bordaba su camisa
hecha de llanto...

(Desde lo oscuro
una luz dibujaba
otro conjuro...)



VH

*1. Dionisio Exiguo tuvo un error de 4 años en la calendarización cristiana. 2. El solsticio de verano es ya este 21-24 de diciembre: entramos a la estación calurosa, con lluvias en la serranía y verdes paulatinos en cada colina y valle. No nos hacen falta las calorías del chocolate caliente, de las pasas de los panetones, los jamones golosos o pavos insaboros. El verano se recibe, ya sea en la costa desértica, la sierra de valles o la lujuriosa selva, con refrescos ( 'meaditos del niño': agua de piña, colación de tamarindo y chicha morada), golosinas de ligera digestión, y noches estrelladas como nunca...
No queremos ser colonos mentales en una Lima con el 'invierno torturante neoyorquino', -armiño y rojo- cantando tontos jingles en inglés y colocando pinos y abetos nórdicos 'nevados' con algodón y fibra de vidrio... ni con un Santa Claus de cartón y tontos muñecos de nieve con nariz de zanahoria deambulando por las calles de neón de una ciudad ya fantasma ... pero que no en Lima.

Un hermoso solsticio navideño con la voz de la negra linda:






!Feliz (sí? sin paz?) Natividad, Belén de Palestina, desde Lima...
Que no demore la justicia de tu causa!

12 de diciembre: GUADALUPE del Tepeyac

A. La Guadalupe es la madre mexicana por antonomasia.
Unificó a nuestros hermanos mexicas como no pudo hacerlo Rosa de Lima en nuestro Perú, feudalizado entre el norteño Señor de los Cautivos, la 'pantorrilluda' virgen de la Puerta, la oriental y 'shefleca' cruz de Bagazán, el huanca Señor de Muruhuay, el sur-chiquense Señor de Luren, la arequipeña y 'nevada' virgen de Chapi, el cuzqueño Taytacha Temblores, la meseteña Mamacha Cocharcas o la lacustre Candelaria (mamacha Candicha), etc. Ni siquiera falta la beata distraida que le prende velas al 'Señor de Sipán'...

Ya ese sólo portento -el de unificar 'hueros, chules, poblanos y pachucos'- la Guadalupe es querible de toda querencia. Pero es cierto que los que tienen

'la fe del carbonero,
que no ha visto pero cree

al bodeguero'

...se traen cada fumada!!... que el grandísimo Cipriani y su esbirro el rafaelísimo Rey & Rey se revuelcan de gusto como cerdos en La Molina...

B. Hay un famoso informe de "científicos" de la NASA de los EU alcahueteado por un odontólogo peruano, residente en México, en el que:
1. Se habla de 'estudios oftalmológicos' del manto de fibra de maguey en que está pintada la Guadalupe. Al no decir quién hace los estudios, debemos suponer que la NASA tiene a Barraquer o a Quiroz entre sus estupendos 'estudiosos'.
Entonces pregunto:
¿Se le puede examinar el 'fondo de ojo' a una pintura (o fotografía, o dibujo)? ¿Se le puede ver el 'ángulo de córnea' (y quizás un posible glaucoma) a una 'figura plana'?

Dice este 'informe científico' que promueven los tartufos:
"hay movimiento retiniano, hay reacción ante la luz..." ¿Sí? ¿Tienen filmaciones o grabaciones?

2. Se dice que la temperatura de esa tilpa de fibra de maguey es de 36.6º C (como la humana)... ¿Sabemos que la vitrina en que está enclaustrada tiene temperatura controlada por reóstatos, como cualquier museo que se respete (aquí, el museo Amano, con telas Paracas)?

3. Un 'médico imparcial' grabó los 115 latidos/min. de un feto en la zona ventral de la Guadalupe... ¿Ah, sí?

4. Se dice que 'no hay pintura en la tela'... ¿Cómo lo saben si 'no se tomaron muestras de los pigmentos'? Para hacerlo tendrían que haber retirado el vidrio frontal, y el arzobispado de México no se lo permitió a ninguna 'misión científica'. Se dice que 'los 'colores' encontrados (¿no que no?) no pertenecen a "ninguno de los elementos químicos conocidos"... Ahhh... de los 92 elementos naturales de la tabla periódica de Mendeleiev ... ¿ninguno? Y de los 30 elementos transuránicos (sintéticos lantánidos, de transición)...¿tampoco? Entonces, ¿que Nº atómico tienen esos nuevos elementos? ¿A cuántos K-jules/mol ionizan?

5. Que 'los rayos LASER 'laterales' detectan que los colores 'flotan' a 0,3 mm del tejido... Si no se retiró el vidrio frontal... ¿habrán escuchado estos 'científicos de la NASA' de la difracción de la luz al cambiar de densidad (Newton, fines del s. XVIII)? ¿Nunca vieron una cucharilla 'rota' o 'suspendida' en el agua de un vaso?

6. Que 'el original dura ya cinco siglos'... ¿Y no qué de la temperatura controlada de la vitrina es -precisamente- para durar? ¿Dónde está el milagro?

7. Que 'resistió el ácido muriático en 1791'... ¿Qué idiota chupavelas (si no, no hubiera tenido acceso a la pintura) querría 'accidentar' así el ángulo superior de una tela 'de iglesia' vertical, con un mero 'limpiador de baño'?

8. Que las estrellas 'son el cielo mexicano de ese entonces' ... ¿Cuál 'entonces'? ¿el del s. XVI del 'indio Juan Diego' o el del XVII en que fueron añadidos los detalles de rayos, estrellas, angelitos y medialuna?

9. Que "se ve en el iris de la virgen el reflejo del iris del obispo Zumárraga... en el que se ve el perfil del indio Juan Diego"... Ah, sí? ¿Han leido los 'científicos naseños' los apuntes de Leonardo recomendando 'ver' en toda mancha de humedad, en toda nube, figuras de leones, caballos y castillos, para disparar la imaginación pictórica? ¿Saben que eso inspiró el suizo Rorschach para hacer el baremo de sus 10 láminas proyectivas de la persona¡lidad?

C. En cuanto a la etimología de 'Guadalupe':
¿Saben los naseños que la virgen tallada del río Guadalupe, en Cáceres, (Extremadura, España) data ya del año 1326? ¿Que Colón llamó Guadalupe a las Antillas francesas ya en 1493? ¿Que el río Guadalupe de Extremadura se llama así porque en arábigoespañol significa 'río de lajas' (piedras laminares en forma de galleta), es decir 'wad-al-ub'?
¿Que la falsa etimología náhuatl 'coatl-apeuh', es decir 'aplastar-la-serpiente (coatl) es forzada y no explica la metátesis de 'a-peu'?
¿Que para los aztecas, el lugar en que se 'presentó' la virgen es el santuario Tepeyac ('coyotal') y estaba previamente consagrado a Tonantzin Cihuacóatl (forma náhuatl para 'nuestra madre-mujer-serpiente') que sincretizó con la 'madre cristiana'?

D. ¿No nos recuerda este 'informe' 'vírgenes que lloran' de la época de los psicosociales 'cortinas de humo' de Montesinos?
¿Sabemos que el 'investigador científico' de los 'ojos' de la Guadalupe es un 'odontólogo' peruano devotísimo del Opus Dei fascista?
¿No es verdad que les conviene a los grupos de poder dominarnos con 'pruebas de fe' que nos distraigan de la vida cotidiana de 'tejas abajo'?

E. ¿por qué es la NASA yanqui la que envía sus 'científicos' en vez de la UNAMéxico, que tiene un excelente departamento de Bioquímica?
¿Por qué la NASA no ha envíado un equipo para descubrir 'cómo se hacen los tacos o los tequeños'?

Víctor Hugo Velázquez Cabrera

9 de diciembre: Batalla continental de Ayacucho



Batalla continental final en la pampa de la Quinua y expulsión de los 'godos' de toda la América. La decisoria acción se dio en el más profundo interior de los Andes, en el centro del mismísimo y antiguo imperio Wari (Viñaque) del siglo X dC. En estos quinuales quedó la sangre de patriotas peruanos indios del norte comandados por una estado mayor criollo continental y también la triste sangre de los indios peruanos del sur, 'secuestrados' por un estado mayor parásito de realistas borbónicos. Pero la victoria fue celebrada en Lima .. y sólo en Lima quedaron sus frutos. Nada cambió en el Perú profundo. Luego, ido Bolívar, cada 'gallo de corral' (los denominados 'ayacuchos'), prefirió pensar en pequeño y 'acomodó' a su gusto su propio muladar. Seguimos siendo 'los Estados Unidos del Sur'.

(Capitulación de Ayacucho, óleo de Miguel Hernández. huancavelicano)

6 de diciembre: san Nicolás de Myra

"La fecha de esta carta que estrujo es muy remota-

apenas si la evoca la luz de una canción-

y la ciudad de que habla se reclina mas allá de los mapas...

Mi amigo sin embargo está cercano

y podría tocarlo si pudiera tocar mi corazón".


Juan Gonzalo Rose


a Benjamín y a Carli
Aparecí en el universo la víspera de san Nicolás de Myra (Bizancio, 280-345), un 6 de diciembre. Aparecí, digo, porque mis amigos más despistados creen que salí del hermoso vientre de mi madre, y eso fue en setiembre (con María de Palestina, Sofía de Nápoles o san Miguel de Cervantes -asu!!!). En fin, como los taoistas, creo que uno comienza a existir el día de su concepción.
Pues yo fui concebido -entre castas caricias de consuelo mojadas de llanto por la muerte de mi abuelo- la víspera de Nicolás Pataka, el griego de Anatolia.
Entre los tristes santos catolicones del aburrido santoral, este del 6 de diciembre se me adelanta y me convence de pronto por su jovialidad, por su amor a los niños, a los enamorados, a los navegantes extraviados. Quizás por eso se ha confundido su día -en pleno adviento navideño- con el mismísimo 'espíritu de la navidad' (el père Noël francés: papá Navidad).

Antes, había pasado su nombre por transformaciones más o menos antojadizas: el Saint Nicolas francés, el Sinter Nikolaus holandés, terminaron en el familiar Santa Klaus neoyorquino, (cuando esta ciudad aún era holandesa y se llamaba Neue Amsterdam)...
De su antipática versión yanqui me alejé durante toda mi iconclasta juventud. Ahora, en la tercera edad, 'con el cabello gris me acerco' con sincera simpatía a este anciano alegre y serio a la vez, pero sin esa barriga que la Coca-cola le chantó -después de una encuesta entre los niños neoyorquinos- ordenando al dibujante Thomas Nash (1881) su promoción navideña con un "abuelo bonachón, que empina el codo -de ahí la nariz roja- y que para siempre con frío".
En las versiones coloreadas de esta estampa nashiana, los calzones de Nicolás eran verdes y la casaca amarilla... Fue sólo en 1902 que la misma Coca-cola le cambió la vestimenta a sus ya ultraclásicos colores promocionales: rojo y blanco.

Ahora, con la barba parecida a la del 'viejito pascuero' (su nombre en Chile y en la sierra argentina), me le acerco, ya convencido de que tanto él como yo hemos sido rebasados por la historia y tergiversados por los varios testimonios de nuestros 'biógrafos': detentamos cuanto infundio, -ya sean alabanzas, ya sean calumnias- se le ocurre a los que no saben vivir vida propia y sí andan 'cuidando' la ajena: curas, moralistas, eruditones, pacatos de atrio, tartufos vela verde, gays resentidos, mujeres postergadas...y también 'amigos' que yo me sé...

Desde mi apatía e incuria navideñas, no voy a negar mi cariño por este anciano greco-turco, 'cayado de oro, barba florida y canas de plata bajo la mitra' que sólo en él deja de ser estúpida' (ahí te hablan Cipriani), y que cada año siento más como mi hermano mayor o, mejor aún, como mi padre (que desde este mismo instante ya no está preso ni torturado por sus ideas, y habita comarcas a orillas de algún desconocido río), sereno como siempre, generoso por demás, y dispuesto a abrir la puerta al humilde, al perseguido, al triste, al solo... Pronto a salir del fondo de la casa con un colchón al hombro, tirarlo en media sala y, con sonrisa dulce, decirme en voz muy queda: "que se acueste ya tu amigo. Mañana siguen conversando: es tarde"... sin que ni la visita de alta noche ni yo sepamos cómo cuernos escuchó desde su recámara las cuitas del expulsado o del triste.

Yo, que odio, como el Abenezer Scrooge de Dickens, la navidad -por postiza, hipócrita, miope y egoista- no puedo ser ingrato a 'mi santo' y muchísimo menos a mi padre (mi personal Hagios Nicholás) y siento que mis puertas deben abrirse más que nunca al aire nuevo, al afecto, a la inocencia del que sufre, del desposeido, de los niños sin risa...
No tendría otra excusa para seguir odiando con tanta fuerza al poderoso, engreído, indolente, pagado de su suerte 'prelado del Perú... mientras intercambia regalos y zalemas con su pandilla tras el poder de la doble K. Perdón por el exabrupto.

Víctor Hugo Velázquez Cabrera


PS. Amable burla de Alfredo D'Arrigo, de Bellas Artes, sabiendo que detesto el alcohol, los colores yanquis de la coca-cola... y la navidad, igual que el Scrooge de Dickens...

2 de diciembre: FLORES PARA JOSÉ MARÍA




Me pregunto:

¿dónde podré coger vistosas flores?

¿Las de alzada corola para el brillo

de la emplumada y majestuosa toca

del solo emperador, o del amado?

Aquellas que atropellan sus colores

cuando es el mediodía,

para alegrar los ojos,

o esas otras

que suaves se deslizan por la sombra...


- He visto floraciones escondidas

en las secretas grutas de los bosques.

He visto ciertamente la floración sagrada

de la oscura ladera de vientos encontrados,

la del pecho oprimido...

He visto en la penumbra de la tarde

el saludo sutil de humildes briznas,

las que apagan discretas sus colores

para entrar en la sombra de los sueños...


- ¿Y aquellas que se abren al olvido,

las que sólo se encienden con ausencias?


- Esas están también

entre las puras flores de teoría

y no en las sienes

fatigadas de aromas y de días ...

Las que guiñan al aire entre las frondas,

las que sueltan su pequeña amenaza

al abismo de la áspera montaña...


- ¿Y las que ahitas de beber la niebla

sueltan sólo el aroma de la ciénaga?

Hay un lirio feliz tallado en agua,

purísimo cristal intruso en tu pantano...

(Se te hizo costumbre ir al jardín florido

del ínkil o la huerta...)

-¿Y no aquellas silvestres que se humildan

para verte pasar sin ser notadas?


Ah, no! Tú ves la Rosa,

esa flor inmortal,

la de Platón, la rosa de Piería o la del persa,

la que vieron Jayam, Martín Adán o Borges...

la que embellece los eruditos tomos de poesía...


-¿Y aquella inmaterial,

la que no ha sido,

la que prepara el día venidero,

la que hoy, 2 de diciembre, 2011,

se cierra paulatina con la tarde,

o se abre clandestina hacia la noche...

la que prepara

su entornado capullo tras el huerto,

la que herida de ausencia en su ramada

urde con el olvido su esbozo de otra flor?

La flor del bosque

cargado de espesura y aroma de resinas

¿no te basta ya entonces?

Aquella que discreta melifica

o aquella otra

que deslíe sin prisa su color?

¿La que se mece al aire de las selvas

y da su aroma en nieves, palidece

de ternura o amor desesperado

en los valles y lagos,

la flor de los rocíos: Sullaywayta?

¿Y las palpitaciones

de pequeñas estrellas sobre el campo

sembrado de arrayán y de retamas?

Tú quieres las del mal,

las de Baudelaire, la flor saxífraga

del florecido cactus,

o la flor del jazmín arrebatada,

la flor de loto meditada y oculta,

la flor de arena que aparece en el sueño,

aquella del pensar sobrio y brillante:

la flor de la amistad,

o el clavel andaluz mordido de lujuria,

las azucenas quechuas marchitadas,

el achankáray soltando su perfume,

el pisónay que aturde en los abismos,

la tierna flor de qantu que es emblema

o la oscura amankay que ya se oculta

bajo los mil abrojos del camino

redimiendo el tormento de la espina?

¿No recuerdas acaso

la del muro secreto,

la que un día cantaste con dolor:

"madreselva encendida

de una morena

torrecitas de nácar

de blanca almena...

Torre de arena:

azafrán derramado

sobre la pena"...?

¿La de la selva madre

que perfuma la noche de las almas

o la del día de amor, jazmín virtuoso

que se suelta en el aire,

o la rosa del pubis nacarada,

del secreto vergel, huerto sellado?


-No.

Busco aquella que alumbra en la mirada

hecha ligeros pétalos de lágrimas,

la que la amada halla dulce en el huerto

cual una novia triste...

la que coge salvaje y la transforma

en una rosa mansa,

blanca en copos,

roja de sangre, o quizás gualda

y toda de oros llena...
la que tiembla en el pecho con la música
y se quiere salir atropellada

a la boca de pétalos ansiosos,

a los ojos transidos de cristales

de miríadas de luces

en el cielo del alma...


-Ah... aquella colosal

que late bajo el mar y aflora lenta

disolviendo sus pétalos sangrantes

cada tarde en su nido de esmeraldas...


(La que sabe de tu alma inquieta, alzada,

la que tierna y voraz y descarnada,

muy a solas te sabe hecho de llanto,

y apagado de sombras y de nada...)


VH velazquez Cabrera

6 de diciembre: San Nicolás de Myra

"La fecha de esta carta
que estrujo es muy remota-
apenas si la evoca
la luz de una canción-
y la ciudad de que habla
se reclina mas allá de los mapas...
Mi amigo sin embargo está cercano
y podría tocarlo
si pudiera tocar mi corazón".
Juan Gonzalo Rose

a Benjamín y a Carli


Aparecí en el universo la víspera de san Nicolás de Myra (Bizancio, 280-345), un 6 de diciembre. Aparecí, digo, porque mis amigos más despistados creen que salí del hermoso vientre de mi madre, y eso fue en setiembre (misma María de Palestina, Sofía de Nápoles o san Miguel de Cervantes -asu!!!). En fin, como los taoistas, creo que uno comienza a existir el día de su concepción.
Pues yo fui concebido -entre castas caricias de consuelo mojadas de llanto por la muerte de mi abuelo- la víspera de Nicolás Pataka, el griego de Anatolia.


Entre los tristes santos catolicones del aburrido santoral, este del 6 de diciembre se adelanta y me convence de pronto por su jovialidad, por su amor a los niños, a los enamorados, a los navegantes extraviados. Quizás por eso se ha confundido su día -en pleno adviento navideño- con el mismísimo 'espíritu de la navidad' (el père Noël francés: papá Navidad).
Antes, había pasado su nombre por transformaciones más o menos antojadizas: el Saint Nicolas francés, el Sinter Nikolaus holandés, terminaron en el familiar Santa Klaus neoyorquino, (cuando esta ciudad aún era holandesa y se llamaba Neue Amsterdam)...




De su antipática versión yanqui me alejé durante toda mi iconclasta juventud. Ahora, en la tercera edad, 'con el cabello gris me acerco' con sincera simpatía a este anciano alegre y serio a la vez, pero sin esa barriga que la Coca-cola le chantó -después de una encuesta entre los niños neoyorquinos- ordenando al dibujante Thomas Nash (1881) su promoción navideña con un "abuelo bonachón, que empina el codo -de ahí la nariz roja- y que para siempre con frío".


En las versiones coloreadas de esta estampa nashiana, los calzones de Nicolás eran verdes y la casaca amarilla... Fue sólo en 1902 que la misma Coca-cola le cambió la vestimenta a sus ya ultraclásicos colores promocionales: rojo y blanco.


Ahora, con la barba parecida a la del 'viejito pascuero' (su nombre en Chile y en la sierra argentina), me le acerco, ya convencido de que tanto él como yo hemos sido rebasados por la historia, tergiversados por los varios testimonios de nuestros 'biógrafos': detentamos cuanto infundio, -sean alabanzas o calumnias- se le ocurre a los que no saben vivir vida propia y sí andan 'cuidando' la ajena: curas, moralistas, eruditones, pacatos de atrio, tartufos vela verde, gays resentidos, mujeres postergadas...y también 'amigos' que yo me sé...


Desde mi apatía e incuria navideñas, no voy a negar mi cariño por este anciano greco-turco, cayado de oro, barba florida y canas de plata bajo la mitra que sólo en él deja de ser estúpida' (ahí te hablan Cipriani), y que cada año siento más como mi hermano mayor o, mejor aún, como mi padre (que en este instante ya no está preso ni torturado por sus ideas, y habita comarcas a orillas de algún desconocido río), sereno como siempre, generoso por demás, y dispuesto a abrir la puerta al humilde, al perseguido, al triste, al solo... Pronto a salir del fondo de la casa con un colchón al hombro, tirarlo en media sala y, con sonrisa dulce, decirme en voz muy queda: 'que se acueste ya tu amigo. Mañana siguen conversando: es tarde"... sin que ni la visita de alta noche ni yo sepamos cómo cuernos escuchó desde su recámara las cuitas del expulsado o del triste.


Yo, que odio, como el Abenezer Scrooge de Dickens, la navidad -por postiza, hipócrita, miope y egoista- no puedo hoy ser ingrato a 'mi santo' y muchísimo menos a mi padre (mi personal Hagios Nicholás) y siento que mis puertas deben abrirse más que nunca al aire nuevo, al afecto, a la inocencia del que sufre, del desposeido, de los niños sin risa...


No tendría otra excusa para seguir odiando con tanta fuerza al poderoso, engreído, indolente, pagado de su suerte Cipriani... mientras intercambia regalos y salemas con su pandilla tras el poder de la doble K. Perdón por el exabrupto.

Víctor Hugo Velázquez Cabrera
PS.
Amable burla de Alfredo D'Arrigo, de Bellas Artes, sabiendo que detesto el alcohol, los colores yanquis de la coca-cola... y la navidad, igual que el Scrooge de Dickens...